foráneos universitarios

5 cosas antes de ser foráneo

Con tantas cosas en las que pensar cuando te preparas para empezar tu carrera, es fácil sentirse desanimado por todo ello: aquí tienes algunas cosas que debes tener en cuenta a la hora de ultimar tu lista de necesidades si vas a vivir solo o ser foráneo.

1. Organizar el alojamiento

Cuando se trata de encontrar un lugar para vivir mientras se está en la universidad, la mayoría de los estudiantes de primer año optan por alojarse en residencias estudiantiles, ya que están gestionadas por la universidad y suponen una forma fácil de conocer a otras personas nuevas.

Las viviendas de alquiler privado o los alojamientos universitarios fuera del campus son alternativas viables, aunque son más populares entre los estudiantes maduros o de postgrado. Si asistes a una universidad local, puede que prefieras ahorrarte los gastos y vivir en casa.

foraneos estudiando | 5 cosas antes de ser foráneo

Es importante saber que nunca es demasiado pronto para empezar a pensar en tus preferencias, ya que muchas de las plazas de las residencias se asignan por orden de llegada. Ponte en contacto con algunos arrendadores para informarte sobre los costos y explorar tus opciones.

2. Organiza tus finanzas

Aunque no parezca la tarea más emocionante a la hora de prepararse para la universidad, es importante poner en orden las finanzas antes de la semana de acogida para poder hacer un presupuesto para el próximo curso.

Lo primero que tienes que hacer es abrir una cuenta bancaria para estudiantes. Muchos de los principales bancos las ofrecen con incentivos añadidos, como descuentos en viajes, la afiliación a Amazon Prime o una suscripción a una biblioteca de lectura en línea, pero lo que realmente deberías buscar es el banco con las mejores facilidades de descubierto al 0% de interés. Los bancos suelen cobrar comisiones diarias si superas el descubierto acordado, así que lee siempre la letra pequeña. Explora otras formas de ahorrar dinero como estudiante.

3. Decidir qué llevar

Averigua lo que te proporcionarán en tu alojamiento para evitar hacer compras innecesarias y comprueba de cuánto espacio de almacenamiento dispondrás: no tiene sentido llevar cosas que no tienes espacio para guardar.

foráneos felices

Si te llevas un ordenador portátil, una tableta o cualquier otro aparato, asegúralo, ya sea a través de tu banco, del seguro de hogar de la familia o de la compañía a la que hayas comprado el aparato. En casos como la licenciatura en animación digital, es necesario que cuentes con alguno. También puedes buscar en sitios de comparación de precios la cobertura más barata.

Con los artículos más grandes que hay que tener en cuenta, es posible que te olvides de las cosas pequeñas. Los artículos de papelería, los analgésicos y los productos de limpieza se olvidan con facilidad, así que si te organizas bien no te faltará nada.

4. Benefíciate de los descuentos en los viajes

Llevar el coche a la universidad no siempre es necesario. Si tienes uno, es probable que el aparcamiento sea limitado, y normalmente tendrás que pagar un permiso para dejarlo en el campus. El transporte público te mantendrá conectado, especialmente en las ciudades más grandes. Así que estudia el ahorro que puedes conseguir utilizando trenes, autobuses y autocares.

Si vas a vivir cerca del campus, puedes considerar la posibilidad de invertir en una bicicleta, ya que a la larga puede resultar rentable. Algunas universidades y sindicatos de estudiantes cuentan con programas de préstamo de bicicletas, así que averigua si puedes beneficiarte de uno en la institución que hayas elegido. Asegúrate de tener en cuenta el coste de los accesorios, como el casco, el candado y el equipo de mantenimiento.

5. Leer

foráneos en la universidad

Muchas universidades publican sus listas de lectura en Internet semanas antes de que empiecen los cursos o te envían los detalles por correo electrónico. Esto te dará una idea de lo que puedes esperar de tu carga de trabajo, y empezar a leer con antelación te dará confianza para las clases.

No es necesario que tengas todos los libros de la lista: identifica los textos básicos y cómpralos. El resto de los libros que necesites los podrás pedir prestados en la biblioteca de tu universidad o los podrás comprar por Internet a antiguos alumnos por una fracción de su precio original.

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